El joven pintor e ilustrador Louie Mauws creció en los alrededores de Gante. En sus cuadros representa tanto figuras abstractas como formas figurativas.

Louie Mauws rompe con los esquemas establecidos para no caer en la representación mecánica de lo que ya se conoce. Su obra muestra una dualidad continua entre la creación y la observación. La necesidad de examinar el registro formalista con y en la materia, partiendo de una forma de intencionalidad aún no plenamente desarrollada, constituye para él una condición de la pintura.