

En 1920, el edificio se incendió y fue devorado por las llamas casi en su totalidad, para ser reconstruido tres años más tarde. Después de la Segunda Guerra Mundial, Ghislain Mahy estableció ahí su taller. El edificio pasó por una rigurosa reforma y el interior del circo se perdió. El taller cerró sus puertas en 1978, y durante los veinte años siguientes, el Circo de Invierno sirvió de almacén de coches clásicos.
En 2005, la promotora sogent adquirió el edificio con el objetivo de reformarlo, darle un nuevo propósito e integrarlo en el nuevo barrio De Krook.
Después de cinco años de reformas intensivas, el edificio abrirá sus puertas en 2023. El patio central se transformará en una plaza pública cubierta que permite a los visitantes desplazarse entre las distintas entradas.
Las oficinas estarán ocupadas por empresas emergentes y scaleups innovadoras, que les darán una nueva vida, o que compartirán sus conocimientos en las salas de reuniones o en el auditorio durante conferencias y presentaciones. Debajo del edificio se construirá una sala de conciertos con capacidad de hasta 500 personas.