El Pabellón Municipal, arquitectura moderna en el corazón de la ciudad
A los ganteses les gusta caminar, por lo que, después de la parada obligatoria en Mokabon, siga por el callejón Donkersteeg hacia el Pabellón Municipal.
Al final de la calle, a mano derecha, se topará con Ooost, un verdadero paraíso lleno de productos regionales de Flandes oriental.
Algo más lejos se encuentra el Pabellón Municipal, una estructura abierta y polivalente, y una verdadera joya arquitectónica. Al principio, relación de los ganteses con esta nueva construcción moderna era algo tormentosa. Su construcción en el corazón histórico de Gante suscitó una multitud de protestas. Pero actualmente, es imposible concluir su fin de semana en Gante sin haber pasado por debajo de este célebre Pabellón Municipal. Una bonita historia de la simbiosis entre el amor y el odio. Destaca particularmente la estructura del techo y el uso de vidrio, madera y hormigón. Bajo este techo se organizan conciertos, funciones de baile y mercadillos: siempre hay algo que hacer.
El pequeño parque urbano, situado en el nivel inferior llamado The Green, está delimitado por un muro de piedra. En verano, muchos ganteses vienen aquí a descansar. Una serie de rampas y escaleras le permiten subir desde el parque hasta la calle, en el nivel superior. Una serie de caminos diagonales comunican la el callejón Donkersteeg con las calles Mageleinstraat y Cataloniëstraat, que le invitan a terminar su fin de semana pasando por las tiendas de moda.