Sma­ke­leyck

La Baja Edad Media fue un periodo realmente fascinante en lo que a la gastronomía se refiere. Nadie ha superado a los borgoñones en la organización de banquetes abundantes y cenas lujosas. Por lo tanto, no es de extrañar que todavía se utilice la palabra “borgoñón” en neerlandés para describir la rica cocina flamenca.  

¿Sabía que…? En los paisajes exuberantes del Cordero Místico, Van Eyck representó nada menos que 75 plantas, hierbas y frutas comestibles.

¿Cuáles eran los platos preferidos en la Edad Media? ¿Qué métodos utilizaban para preparar y conservar la comida? ¿Ya se usaban cuchillos y tenedores en la Edad Media?

Con ocasión del año temático “OMG! Van Eyck was here”, la historiadora Annelies Van Wittenberghe (Universidad de Gante) y el experto en arqueología culinaria Jeroen Van Vaerenbergh han examinado numerosas fuentes históricas acerca de la comida. Basándose, entre otros, en historias y recetas antiguas y descubrimientos arqueológicos, han reunido un tesoro de información sobre las costumbres culinarias de los borgoñones medievales. Han compartido los conocimientos adquiridos con el comidista flamenco Olly Ceulenaere, chef del restaurante Publiek en Gante. Este ha transformado la gastronomía medieval en recetas contemporáneas.

Gracias a los conocimientos de Jeroen y Annelies, Olly logró seguir los pasos de los ganteses del siglo XV y descifrar, además de sus hábitos alimentarios, sus preferencias gustativas.

“Cuanta más información analizaba, más me daba cuenta de que nuestra cultura alimentaria actual no es tan diferente. Al igual que el uso de técnicas de preparación duraderas (encurtido y fermentación), la recolecta de frutas y verduras salvajes y el uso de productos locales y de temporada.”

Olly Ceulenaere

Así, desarrolló algunas recetas con ingredientes históricos, aptos para todos los gustos, pero con un toque especial. Y sobre todo: elaborados a partir de productos regionales de calidad provenientes de agricultores o productores locales.

No solo Olly Ceulenaere puso manos a la obra, algunos emprendedores ganteses también se dejaron inspirar para crear sus propias delicatesen utilizando ingredientes típicos de la Edad Media. Han desarrollado numerosos productos artesanos bajo la etiqueta de Foodmaker gantés. Además de un queso Van Eyck, salchichas blancas y fuet, también podrá degustar deliciosos bombones, helados y panes. Puede reconocer a estos Foodmakers gracias a los escudos atribuidos durante el año dedicado a Van Eyck, en función de su oficio.

Van Eyck y su obra maestra, el Cordero Místico, están estrechamente vinculadas a Gante, y a su vez, Gante se inspira en Van Eyck. Numerosos restaurantes y bares de Gante han creado una receta propia con ocasión del año dedicado a Van Eyck. Desde un café Van Eyck, un cóctel o una sopa hasta un menú Van Eyck completo. Busque los escudos en el escaparate y descubra sus preparaciones únicas.